Introducción Los imanes de ferrita, también conocidos como imanes cerámicos, han sido durante mucho tiempo un pilar fundamental en aplicaciones industriales y de consumo gracias a su rentabilidad, resistencia a la corrosión y estabilidad a altas temperaturas. Compuestos principalmente de óxido de hierro (Fe₂O₃) combinado con compuestos de estroncio (Sr) o bario (Ba), estos materiales cerámicos sinterizados presentan un equilibrio único de propiedades magnéticas y físicas que los hace indispensables en ámbitos específicos. Si bien los imanes de tierras raras, como el neodimio (NdFeB), predominan en aplicaciones de alto rendimiento que requieren una fuerza magnética extrema, los imanes de ferrita siguen destacando en entornos donde la durabilidad, la asequibilidad y la resiliencia ambiental son primordiales.
A medida que la tecnología avanza en todas las industrias, desde las energías renovables y la electrificación automotriz hasta la fabricación inteligente y la innovación médica, los imanes de ferrita están descubriendo nuevos roles en campos emergentes. Este artículo explora sus posibles aplicaciones en siete dominios de vanguardia: sistemas de energía renovable, vehículos eléctricos y autónomos, redes inteligentes y transferencia inalámbrica de energía, dispositivos médicos y biotecnología, industria aeroespacial y de defensa, electrónica de consumo e IoT, y remediación ambiental. Mediante el análisis de los últimos avances, las tendencias del mercado y los desafíos técnicos, descubrimos cómo los imanes de ferrita están evolucionando para satisfacer las demandas de un panorama tecnológico en constante cambio.